Dado el resultado final del partido, el Inter rozó la proeza de forzar la prórroga. Cabezazo al larguero de Matip para casi hacer el 1-0, una parada de Alisson en un lanzamiento de falta, y una amarilla (casi roja) a Alexis en la primera parte. Después del descanso, otra parada de Alisson y otro palo del Liverpool, esta vez obra de Salah. A los 60' llegó el premio para el Inter con el gol de Lautaro por la escuadra. Tras esto, otra entrada dura de Alexis que el árbitro español Mateu castigó con la segunda amarilla y la expulsión. Otro palo de Salah y ocasiones varias que hacían que el Liverpool no empatara y corriera el riesgo de encajar el segundo en cualquier jugada aislada.
A fin de cuentas, el Liverpool hizo valer la renta conseguida en Milán (aquellos dos goles en los últimos 15 minutos) y espera ya rival en cuartos. Eso sí, seguro que la derrota dará al menos para la reflexión...